Los medios de comunicación se han hecho eco en las últimas semanas de las denuncias de familiares de pacientes diagnosticados de cáncer de forma tardía por culpa de las restricciones sanitarias de la COVID-19. Y es que la pandemia ha tenido un impacto muy negativo en los cribados de detección temprana de esta enfermedad.
La falta de camas en los centros sanitarios de todo el país, la cancelación de operaciones y la atención telefónica se han traducido en un incremento en el tiempo de detección del cáncer y en la espera para las intervenciones quirúrgicas, o lo que es lo mismo, en un cóctel muy peligroso que supone un reto para los profesionales de la oncología.
Según publica Medscape, el agotamiento de los oncólogos en todo el mundo provocado por la pandemia, es otro de los problemas derivados de esta crisis sanitaria sin precedentes. Tal y como alerta este medio el mensaje 'quédate en casa' fue seguido en la primera ola de forma muy rigurosa por enfermos que debían haber acudido a urgencias mucho antes, y se ha traducido en miles de infradiagnósticos del cáncer, causa por la que consideran que es imprescindible no repetir este error y que se ahonde de forma correcta en la telemedicina con expertos en esta especialidad de forma directa, si acudir a los centros sanitarios supone un riesgo.
"Hemos visto cómo algunos de nuestros pacientes, especialmente con enfermedad metastásica, han sido desestimados para medidas intensivas y tratamientos de soporte vital, así como tratamientos específicos contra la COVID-19 (tocilizumab, remdesivir, etc.) ante el colapso sanitario general de la primera ola", explica la oncóloga Laura Mezquita, del Departamento de Oncología Médica del Hospital Clínic de Barcelona.
Recientemente, una encuesta presentada en el Congreso de la European Society for Medical Oncology (ESMO) 2020 alertaba de que un tercio de los oncólogos encuestados sentía sufrimiento moral, y más de la mitad tenía sensación de agotamiento.
La pandemia del coronavirus lastrará hasta un 5% la supervivencia en cánceres como el de pulmón, según han denunciado especialistas en esta materia, lo que supondrá 1.300 muertes adicionales en España y romper la tendencia lograda en la última década por este tumor que cada año se cobra la vida de unas 28.000 personas en nuestro país. Lo advierten los oncólogos que ya hablan de "otra pandemia", ante la que no se debe bajar la guardia. Por ello, piden un plan nacional contra el cáncer y más fondos para la investigación.
Asimismo, el pasado septiembre, la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) advertía, en un encuentro con científicos, que la pandemia ha paralizado la investigación, lo que ha repercutido en ensayos clínicos, en nuevos proyectos o en la financiación para combatir esta enfermedad.